“Deshazte de lo que perdió el color y el brillo, deja entrar lo nuevo en tu casa y dentro de ti mismo”.
JOSEPH NEWTON
Muchas personas tienen el hábito de guardar ropa, zapatos, muebles, electrodomésticos, repuestos usados, piezas incompletas, galones de pintura a medias, equipos para ejercitarse que sirven de perchero, objetos, sillas, que ocupan rincones y otras cosas del hogar que ya no usas desde hace bastante tiempo, con la acostumbrada frase “lo necesitaré luego o mientras busco el repuesto”; y así transcurren las semanas e incluso años ocupando un lugar y llenándose de polvo.
¿Te gusta tener cosas nuevas? ¿Estrenar? ¿Contar con un nuevo electrodoméstico que te facilite las actividades del de la casa? ¿Renovar tu hogar?
Entonces debes comprender que todos esos objetos tienen una vida útil, un tiempo de uso hasta un punto de descarte ya que sus materiales se degradan, disminuye su calidad, funcionamiento o salen otros al mercado más actualizados. Sacarlos de tu casa, armario y de tu vida originan que la fuerza de ese vacío atraiga algo nuevo para ocupar ese lugar, para darle cabida a nuevas experiencias y oportunidades
Limpiar los espacios de manera consiente genera bienestar, y si tu inmueble está a la venta, la posibilidad de ser ocupado por una nueva familia o pareja se incrementará.
El momento de ordenar los espacios, es también ordenar tu casa, tu mente y tú vida. El poder hacer es siempre el presente, es en él donde única y exclusivamente podemos vivir, crear, amar, rectificar; es, en resumidas cuentas, la única oportunidad que el ser humano tiene para poder manejar los hilos de su hogar.
Mariela Ledezma